6 motivos para comer manzana y una receta

Principales bondades de este fruto junto a una receta para preparar la deliciosa tarta de manzana y queso.

La manzana cayó en desgracia en la época de Adán y Eva, pues aunque era en sentido figurado lo de ‘fruto prohibido’ la mala prensa hizo su trabajo.

Sin embargo nadie puede ocultar los beneficios para la salud que trae comer a diario manzanas, y aquí expondremos 6 de sus bondades más notorias:

1. Su alta tolerancia digestiva la convierten en uno de los remedios naturales más eficaces para tratar tanto el estreñimiento, comida con piel y cruda, o la diarrea, triturada y sin piel.

2. Sus propiedades antioxidantes ayudan a frenar la acción de los radicales libres en el envejecimiento y degeneración del organismo.

3. Añadir a tu rutina de higiene dental el simple hecho de comer una pieza al día ayudará a mantener tus encías y dientes sanos.

4. Es también una fruta diurética y depurativa por lo que está muy recomendada en dietas sanas para el corazón o en dietas de pérdida de peso.

5. Sus propiedades astringentes favorecen el mantenimiento de la piel limpia, suave y firme.

6. Conciliar el sueño puede ser más sencillo tras comerse una manzana al día ya que su contenido en fósforo tiene efectos sedantes.

Tarta de manzana y queso

Es una muy sencilla forma de preparar con una sola manzana una exquisita tarta de manzanas para acompañar tu desayuno o el matesito de la tarde.

Ingredientes

¼ de Nata líquida

1 Manzana golden o similar

3 Huevos

125 gramos de Yogur natural sin azúca

125 gramos de azúcar

80 gramos de Harina

200 gramos de queso cremoso de untar

25 gramos de azúcar para decorar

135 gramos de Leche

Preparación

Introducimos todos los ingredientes en el vaso de la batidora. Batimos hasta conseguir una mezcla diluida y uniforme. Volcamos toda la mezcla en el molde.

Pelamos la manzana, sacamos el corazón con un saca corazón o descorazonador. La cortamos por la mitad y hacemos láminas finas. Con mucho cuidado las depositamos sobre la mezcla las láminas de manzana prestando especial cuidado para evitar que se hundan. Las colocaremos de tal forma que se superpongan una sobre la otra, como podéis observar en la foto. Una vez colocadas expolvoreamos los 25 gramos de azúcar sobre su superficie para obtener una tarta brillante.

Precalentamos el horno 15 minutos a máxima potencia. Introducimos el molde y horneamos entre 45 o 60 minutos a 180 grados centígrados. Para comprobar que la tarta está en su punto, pinchamos con un palillo metálico y si lo sacamos limpio significará que ya lo tienes hecho, en caso contrario, dejamos unos minutos más.

Sacamos del horno y dejamos enfriar totalmente, una vez frío desmoldamos