Las redes sociales
¿Beneficiosas o perniciosas?
Ríos de tinta han corrido analizando desde diferentes puntos de vista las redes sociales y mucho se seguirá escribiendo y hablando.
Que es un tema polémico no hay duda, que hay argumentos a favor y argumentos en contra tampoco hay duda. Que hay quién las defiende con pasión y quién las demoniza es una realidad.
Por Iara Bermúdez
Las verdades absolutas en temas de opinión no existen pero lo cierto es que la aparición de las nuevas tecnologías (celulares-sms, internet-redes sociales), ha cambiado la forma de relacionarse de gran parte de la sociedad. Es un fenómeno que se puede enfocar desde muchos ángulos y se puede analizar diferentes aspectos.
Las redes sociales son un vehículo para la integración, para compartir información, para la comunicación. Lo que está en entredicho sobre todo es el uso que se hace de ellas.
Como toda herramienta si se la usa bien es muy útil, pero como toda herramienta primero hay que aprender a usarla, mal utilizada puede ser peligrosa; como todos los productos peligrosos se debe dejar fuera del alcance de los niños.
La vida moderna, sobre todo en las ciudades nos envuelve en una vorágine que nos ocupa todo el tiempo y de la que no podemos escapar. Para los adultos cada día se hace más difícil el relacionarnos con otras personas fuera del ámbito laboral.
Muchas personas se quedan solas a edades en las que se hace difícil conseguir con quien salir, con quien compartir los ratos de ocio y normalmente se van quedando en casa viviendo en soledad.
Las redes sociales nos dan la posibilidad de tener amigos “virtuales”. El chat nos permite charlar con mucha gente sin salir de casa. Incluso hay quien chatea con varias personas a la vez o se chatea en “salas virtuales” con un grupo.
Conversar con alguien a través del chat abre muchas posibilidades de “conocerse” a fondo sin haberse visto personalmente. La experiencia de poder hablar con gente de otros países, incluso con la cámara web poder ver a la otra persona en directo, nos abre a nuevas amistades, a conocer otras culturas, a tener con quién compartir algunos ratos de ocio.
El análisis positivo es que gracias a las redes sociales se puede paliar la soledad, se tiene con quién conversar, se conoce gente, se pueden conocer nuevas culturas relacionándonos con gentes de otros países. El análisis negativo es que los usuarios de estas redes se acostumbran a este tipo de relaciones, no salen de casa, pierden el contacto físico con la otra persona, las relaciones son menos comprometidas, menos sinceras.
Uruguay es un país de emigración, muchos compatriotas se han marchado a buscar una vida mejor lejos de su tierra natal.
Hasta no hace mucho, el comunicarse con los suyos era a través del teléfono o del correo, se grababan cassettes que se enviaban por correo o que llevaba algún amigo viajero, también se escribían cartas manuscritas, cosa que para algunos jóvenes puede sonar a prehistoria. La espera del cartero, mirar el buzón de correspondencia podía cambiarnos el ánimo en segundos. Guardar y releer la correspondencia de un ser querido, de un familiar o de un amigo era una práctica corriente que hoy en día casi no se usa.
Las redes sociales han hecho que la comunicación sea más fluida, más constantes, inmediatas, no importa en qué parte del mundo se encuentren unos y otros.
Las amistades de la niñez y de la adolescencia son difíciles de mantener, cada uno toma un camino diferente, pocos siguen viviendo en el mismo barrio, algunos no se vuelven a ver nunca más.
Hoy es bastante común que grupos de escuelas, o de liceo se vayan re encontrando a través de la red. Personas que hace 20, 30, 40, 50 años que dejaron de verse pueden retomar el contacto en forma virtual. Pero este es el primer paso, después viene la segunda etapa que es la del reencuentro físico, la de ir a tomar algo, la de volver a verse. Mi experiencia personal es muy rica en este aspecto, con el grupo de la escuela nos reunimos mensualmente, celebramos los cumpleaños, recuperamos grandes amigos de la niñez que habíamos dejado de ver durante años.
Lo paradójico de la situación es que los detractores de Internet apuntan que este tipo de redes nos llevan al individualismo, a no saber cómo relacionarnos con los demás, a tener amigos “virtuales” en lugar de amigos con los que poder compartir la vida, que nos hace más sedentarios, que nos aleja del mundo real.
En este caso el resultado es el contrario, gracias a las redes sociales hemos recuperado el contacto con los amigos, salimos, nos vemos, compartimos vivencias, recuerdos, anécdotas.
Puede ser que en algunos casos la gente se quede solo en lo virtual, pero lo que sí es cierto que lo bueno o malo no son los medios, sino el uso que se haga de los mismos.
Si las redes sociales se usan como medio, como herramientas, como vehículo integrador, son buenas, lo malo viene cuando se convierten en un fin en sí mismas y ocupan toda la atención y el tiempo de las personas.
En el caso del grupo de la escuela, ha servido para retomar el contacto con amigos de la infancia con los que se habían perdido todos los vínculos, Ha servido para acercar a una serie de personas que se comunican a través de Internet casi a diario pero que además se ven con asiduidad y comparten vivencias, recuerdos, anécdotas.
También el teléfono celular es un vehículo para el acercamiento de personas. El movimiento 15M de los “indignados”, en España, se formó a partir de una convocatoria hecha a través de sms. La gente salió a la calle a protestar contra las injusticias y se unió y se organizó en unos pocos días. La tecnología no es buena ni mala, los que son buenos o malos son los humanos y lo que hace peligrosa una tecnología es su uso.
Las personas mayores por distintas razones tienen problemas para acercarse a las nuevas tecnologías, por falta de formación, por miedo, por problemas económicos. Estas personas si están solas no tienen posibilidades de relacionarse con más gente, en cambio los que si pueden acceder a Internet pueden mitigar la sensación de soledad relacionándose con otras personas en forma virtual.
¡Las redes sociales nos cambiaron! No importa la hora que sea, la información está ahí, delante nuestro, al alcance de la mano. Ya no tenemos disculpas para no saber sobre alguien o algunas personas. No necesitamos esperar por una llamada o por una carta para enterarnos de algo. Es dinámica, inmediata.
Quedan otras redes: las de amistad, las de conseguir pareja, las que unen a personas que comparten determinados intereses, pero este…es otro tema.
MUY BUEN0 Y AMENO. SIN DUDA LA TECNOLOGÍA HOY DÍA ES IMPRESIONANTE, NOS APROXIMA EN SEGUNDOS DE TODO TIPO DE INFORMACIÓN PERO CUIDADO! DEPENDE DE COMO LA USEMOS
Excelente enfoque Depende de nosotros la utilización y el fin que le demos a la información.
Un tema de super actualidad. Un ‘dominio’ o ‘territorio’ que ha tenido un crecimiento fulgurante y que continuará creciendo aún su número de adeptos. Algo a lo que se le debe el hecho de que sea capaz de producir verdaderos cambios de comportamiento en cuanto a nuestra rutina de vida se refiere. Un muy buen artículo. Gracias una vez más a vuestra columnista y, por supuesto, también a ustedes, ElReporte.com.uy