Suecos quieren pagar más
Un amigo purgó su condena de tupamaro light y salió de la cana, se fue para Argentina y terminó en Suecia. Los Suecos lo primero que hicieron fue enseñarle el idioma y le adjudicaron a él, señora y su hijo uruguayo un apartamento, porque el otro hijo nació sueco.
Mientras aprendía sueco, resolvió pintar el apartamento que le habían adjudicado porque a su criterio había vivido otra gente y la mejor limpieza es una pintada general, en los tiempos libres.
En lugar de pasear se dedicó a pintar y acondicionar el apartamento que tan generosamente le había adjudicado el gobierno.
Al mes o algo más que había terminado de limpiar, digo pintar, vino un equipo de pintores pagados por el gobierno y le pintaron nuevamente el apartamento de punta a punta.
La heladera y la cocina se la cambiaron a pesar de que funcionaban bien al criterio uruguayo, pero al criterio sueco ya habían cumplido su ciclo, todo perece por más que se remiende o repare.
Es un criterio doble propósito, que las cosas funcionen en forma y que el sistema funcione, porque de esta forma mantienen la ocupación laboral de la mano de obra disponible y las fábricas produciendo.